Como ya lo hemos indicado en anteriores presentaciones el covid-19 se contagia principalmente por los aerosoles que flotan en el aire y pueden permanecer ahí por un largo tiempo.La mejor manera de evitar el contagio, además de los cuidados personales de limpieza y uso de mascarillas es contar con adecuados sistemas de ventilación en los recintos cerrados .

Se ha podido establecer qué 45 metros cúbicos de aire por persona/hora es un caudal de aire razonable para garantizar la óptima calidad del aire.

La única manera de asegurar una adecuada renovación del aire interior y con ello mantener el aire limpio es por medio de extractores de aire eléctricos, que sean capaces de mover en todo momento el caudal de aire determinado por la ecuación número de personas x 45 m3/h.

Si pensamos por ejemplo en una sala de clases de colegios, liceos, escuelas o universidades y con 40 alumnos en su interior aplicaremos la fórmula 40 alumnos x 45 m3/h=1800m3/h de renovación de aire.

Para producir está adecuada renovación de aire es preciso contar entonces con un sistema mecánico que nos permita cambiar la masa de aire interior viciada por una masa de aire fresco y limpio.

En algunos casos bastará con montar en el muro o marcos de ventanas uno o más extractores axiales modelo AXIS-Q-250-4M de la marca Blauberg (Germany) de fabricación Europea capaces de botar al exterior la masa de aire viciado y procurar el ingreso de aire fresco por presión negativa y por medio de rejillas de toma de aire eventualmente ubicadas en la o las puertas de acceso, también, de la marca Blauberg y del modelo Decor-T-2.

Es posible que una alternativa de montaje de extractores en muros o ventanas no sea posible por la arquitectura del recinto y se requiera otra alternativa para acoplar a ducterias, en ese caso será recomendable seleccionar uno o más extractores centrífugos en gabinete insonorizado de la marca Alemana Blauberg, modelo ISO-B-315 y procurando el ingreso de aire de recambio por medio de una rejilla modelo Decor-T-2, de Blauberg, ubicada en la puerta de acceso al recinto.

La mejor manera de controlar la calidad del aire es instalando un sensor de CO2 que cuente con detector infrarrojo no dispersor (NDIR) , marca Blauberg modelo CD-1 que además de monitorear la calidad del aire interior sea capaz de poner en marcha por medio de una señal el sistema de renovación de aire instalado y mantener de esa manera a raya la concentración de CO2 por debajo de las 600 ppm.

Estudios en España han concluido que tener una sala o cualquier recinto cerrado con indices de concentración bajo (600 ppm) se pueden evitar hasta un 95% de contagios del Covid 19 por aerosoles.

Una alternativa más simple, pero menos efectiva es la de aplicar ventilación natural cruzada.

Lo primordial en este sistema es conocer la concentración de C02 por medio de un sensor CD-1 Blauberg con NDIR y cuando los índices muestren niveles altos de concentración, se encenderán primero luces amarillas y después rojas, en ese momento, proceder a abrir puertas y ventanas y producir un flujo cruzado.

Esta alternativa es menos recomendable porque implica estar al arbitrio del clima, de como y por donde sople el viento. Produce además en muchos casos corrientes de aire muy desagradables.

La ventilación de TRESPI es vida.